miércoles, 24 de junio de 2015

San Juan

Hoy, noche del solsticio de verano, pasando el Sol por el trópico de Cáncer, la noche más larga del año, he terminado de escribir un relato corto. Hacía años que no lo hacía.
Lo he titulado Estancias y es la reelaboración de los apuntes de un sueño que tuve la semana pasada, de algunos recuerdos de infancia y de una historia que me aconteció el pasado fin de semana.
Se acaba de apagar una vela que encendí esta noche, para ahuyentar lo viejo y cansino que hay en mí mismo.
La tromba de agua que ha caído esta tarde ha refrescado el ambiente.
Mañana volveré a leer el relato y trataré de limar el tono y el fraseo. El contenido quedará básicamente igual. Debo reconocer que estoy satisfecho; simplemente satisfecho, que ya es bastante.
Menos mal que estoy fumando R1.
Mañana, hoy, es miércoles. Un miércoles de verano.